Cuando se trata de fiestas que se sienten como una experiencia completa, el 8E83 Club ya domina el juego. Pero lo del sábado fue otra cosa: una auténtica Misa. Yeyo TQM y Donny Graff convirtieron Tijuana en un templo de sudor, energía y comunión colectiva, dejando claro por qué tantos lo llaman uno de los momentos más épicos del año
Entro Xluzii, y aquí la cosa se transformó en forma definitiva.
Su DJ set fue una reconfiguración total del mood: energía, baile, movimiento, soltura.
Xluzii no sólo puso a todos a bailar: convirtió al público en un solo cuerpo, una sola masa. No hubo timidez, no hubo calentamiento lento. Su selección fue precisa, punzante, hecha para que la gente se soltara y entendiera que aquí no se venía a “pasarla bien”, sino a vivir algo.
Cuando Yeyo TQM y Donny Graff subieron, el Rancho Grande se convirtió en otra cosa.
Ya no era un venue, ya no era un concierto, ya no era una fiesta. Era un ritual colectivo.
Había algo casi espiritual en cómo la gente los recibió: gritos, manos arriba, celulares grabando, pero también una vibra de entrega total. Como si cada persona hubiera esperado semanas este momento.
La noche en que Tijuana se reunió a rezar:
así se vivió la misa de Yeyo TQM y Donny Graff en el 8383 CLUB
La apertura quedó en manos de elszdi y su crew —Young Soax, Revel Sam y Ponchito— quienes tuvieron la responsabilidad de encender la primera chispa en un lugar que ya estaba cargado de expectativas .
Su set fue un golpe de bienvenida: fluido, fresco, con esa vibra de artistas que no sólo tocan, sino que entienden exactamente dónde están parados. Cada uno imprimió su energía sin competir, como si se pasaran el micrófono entre hermanos. Integraron al público sin forzarlo, le marcaron un paso inicial, lo prepararon para lo que venía.
Después llegó Bellaking, una presencia magnética que llenó la tarima sin necesidad de pedir permiso. Su show tuvo un pulso más intenso, una vibra más frontal.
CEI + Snowkidd, Young Luisma BAKU y Pedroga: el momento chuggg que subió la intensidad
CEI y las cosas estaban como me goofy uno de los actos más esperados por quienes siguen de cerca la ola chuggg. Su entrada fue un cambio de clima: sintió como un golpe de adrenalina.
Hubo saltos, hubo gritos, hubo entrega y mucho humo. Fue rudo, fue sucio, fue poderoso. Esa parte del evento marcó una curva ascendente que nadie quería que bajara.














Era una misa laica, sudorosa, juvenil, intensa. Una misa donde el evangelio eran los beats, las voces y esa complicidad que tienen como dúo y que hace que cada show suyo sea una experiencia por parte de la obsesion.
En medio de toda la euforia, hubo un momento que quedó grabado en la atmósfera: cuando Yeyo, entre canción y canción, soltó un “cuando vine a Tijuana por primera vez no era ni la mitad de gente que ahora”. No lo dijo como presunción. Lo dijo como quien mira alrededor y entiende que está parado justo en el centro de algo que está creciendo de verdad.
Esa frase cayó como una verdad que todos ya intuían: la escena está mutando, expandiéndose, fortaleciendo sus raíces. Cada evento, cada lineup independiente, cada colaboración, cada público que decide pagar un boleto para ver artistas emergentes






El cierre con HainaFromChina: cuando la noche ya era leyenda
Después de semejante explosión, el cierre con HainaFromChina fue la cereza perfecta: no bajó la energía, sino que la transformó en una última vuelta de baile y satisfacción.
Fue el final correcto para una noche que ya quedaba registrada en la memoria colectiva de la escena juvenil tijuanense.


Para que una noche así funcione, no basta con talento.
Y aquí todo coincidió:
El Rancho Grande, amplio, estético, respirable, mitológico incluso.
La intervención visual de Bruha, que convirtió cada rincón en un espacio con intención.
El sonido, impecable toda la noche, sin fallas, sin saturaciones, sin matar la vibra.
El patrocinio de Four Loko, que empujó el ambiente a niveles casi rituales.
La producción conjunta de 8E83 Club y 99Club, una combinación que elevó el estándar a un nivel que rara vez se ve.
Todo fue parte del hechizo.


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